Clásico: vas pasado por la zona de cosméticos de la tienda departamental y te ofrecen 12 perfumes diferentes. Pero justo te detienes frente al mostrador de tus cosméticos favoritos y, básicamente, todos los maquillistas finjen demencia hasta que realmente muestras interés en sus productos. Pues sí, esos amables señoritos y señoritas están ahí para atenderte Y venderte algo. Y eso es algo que no se nos puede olvidar.
Sin embargo, también son personas preparadas que pueden darte un look nuevo, enseñarte a usar colores y técnicas que no conoces para embellecer tus facciones y recomendarte lo que mejor te va de su catálogo de productos. Así que si estás considerando aprovechar sus servicios, ten en cuenta algunos puntos que, seguramente, te harán la experiencia más grata.
- Planea tu visita: No es poco común que un día te vayas a dar la vuelta a ver qué productos son los que más te gustan, qué tipo de look quieres probar. Porque no es lo mismo lo que hacen en MAC que el estilo de Helena Rubinstein, por ejemplo. Otro tip es fijarse en el maquillaje de las chicas de cada marca. Pon atención a la aplicación que haya hecho sobre su propia cara, eso te dará una idea de su técnica y si va contigo.
- Ve a horas poco congestionadas: una hora después de que abren y 90 minutos antes de que cierren, excepto en fines de semana o a las horas de la comida, que suelen ser más bien pobres en servicio al cliente.
- Cuando sepas a qué marca le prestarás tu rostro, acércate y pregunta directamente si te pueden hacer una prueba de maquillaje. A mi me gusta más pedir una cita formal para esto (una vez que he decidido qué marca voy a probar) pero si vas decidida el mismo día, lleva tu carita suavemente exfoliada y limpiecita. No te maquilles ese día.
- Habla: si no te preguntan, no importa. Es indispensable que les comentes sobre tu estilo de vida, así que describe tu trabajo, tu guardarropa, el maquillaje que ya tienes en casa, los looks que odias. Deja al maquillista mostrarte algo distinto a lo que sueles usar pero también, dale pistas.
- Pregunta todo lo que se te ocurra. Y pídele que te vaya apuntando en una hoja qué producto aplica en cada zona para que realmente aprendas el maquillaje. Incluso, recomiendo llevar un cuaderno para que no haya ningún pretexto (lamentablemente en México no todas las marcas tienen el rigor de usar face charts pero no por eso tienes que irte sin conocimientos precisos de qué puso dónde).
- Conoce tus derechos y tus obligaciones. A menos que el maquilista te diga desde antes que estás obligada a una compra mínima para que te maquille, no estás obligada a comprar. (Pero, definitivamente, prepárate para un momento sumamente incómodo y miradas desaprobatorias).
- Si el maquillaje aplicado lo vas a usar para asistir a una fiesta o evento, definitivamente compra al menos los productos para retocar: lápiz de labios, gloss y polvo matificante.
- Puede pasar que la situación se vuelva hostil, ya sea porque no sientes química con el maquillista o no te gustó el look final. Si es así, no cedas. Para escapar siempre puedes usar la frase "voy a dar una vuelta y ver cómo se ve el maquillaje en una luz distinta". Generalmente entenderán que no estás a gusto con el resultado final.
Cuando vayas, relájate y disfruta desde el principio el proceso. Espero que en el momento "ta-rán" te sientas feliz por el experimento. Y cuéntame cómo te fue o te ha ido en esas experiencias Ü
Nos encanto tu post... la descripción es perfecta...consejos geniales como siempre un 10 besitos GUAPOLOGA
La gente de MAC es muy amable!
Recuerdo una vez, hace ya un rato, en el que por no tener nada mejor que hacer nos acercamos una prima y yo al mostrados y terminamos maquilladas sin tener que comprar nada.
Desde entonces siempre me doy una vuelta por la tienda y voy haciendo mi kit de maquillaje.
Muy buen post, saludos!!
uy yo ya e probado eso y lo amo!!!
amo comprar en mac y que me maquille y gastarme mis pesitos en maquillaje que luego casii no uso pero es que no se que tienen esos polvitos de colores que me atrapa, bueno hasta mi mama se queja por eso siempre he sido de ir de compras sola jeje
un besote!