Por Simone

Un cuentito

A principios de la década ochentera, viajaban coincidentalmente en el mismo vuelo Jane y Jean - Louis. Ella llevaba por bolso una canasta de paja y el hombre no pudo evitar preguntarle por qué; Jane le contestó que no había hallado ninguna bolsa que le acomodara para viajar, ni por el tamaño ni por la forma de cerrarse, por lo que había optado por esa excéntrica opción. Jean- Louis, extraordinario comerciante, invitó a Jane a que diseñaran juntos un modelo a su gusto y, por fin, se deshiciera de semejante cesta.

Esta historia no tendría mayor relevancia si no fuera porque de ésta nació un ícono- mito de los accesorios de moda: El bolso Birkin de la casa Hermes nació en 1984. Efectivamente, amigos y amigas, los arriba nombrados eran nada menos que Jane Birkin, cantante y actriz británica, y Jean- Louis Dumas, presidente de la compañía en ese momento.

La casa francesa ya tenía práctica en eso de diseñar bolsos con el nombre de alguna mujer famosa; la prueba es el bolso Kelly (Grace Kelly apareció en un número de la revista Life con el bolso y la Casa Hermes se lo retribuyó nombrándola en su honoer). Sin embargo, el modelo Birkin ha adquirido mayor fama y presencia en los reflectores por numerosas razones: de entrada, es completamente aspiracional, ya que los precios comienzan alrededor de los 5 mil dólares (pudiendo llegar a los 40 mil o una rarísima con diamantes, a los 150 mil usd); además, la piel es de cocodrilo y de primerísima calidad y cada bolso se manufactura a mano. Otro detalle, para conseguirla -además de tener el dinero-, hay que lograr apuntarse en una lista en la cual el turno probablemente te llegue en 3 años a partir de que estés en ella. Y eso si lo logras porque el exceso de demanda ha cerrado las listas.

¡Al diablo con Prada, esto es lo de ayer, hoy y siempre!

Conociendo esos detalles, creo que podrás comprender la magnitud de lo que Michael Tonello narra en un libro 'recién salido del horno' titulado "Bringing Home the Birkin". El autor destapa el modo en que se ha hecho bastante rico -y ahora, reconocido- al conseguir Birkins por todo el mundo y revendérselas a clientas ricas e impacientes. Pero, ¿no hay una lista de espera? ¿Cómo consiguió, en 2005, 130 bolsas de este tipo en tres meses? Ese es justamente el quid de su libro: nos cuenta con detalles cómo logró romper el código y, además, revendérselas a adinerados clientes.

Michael Tonello (su foto es casi inexistente en la red) nació hace 49 años en un pequeño pueblo (Osterville) de Massachussets, en Estados Unidos. Estudió maquillaje y montó una agencia de peinadores y maquillistas. Finalmente decidió irse a Barcelona a vivir y ahí es donde comenzó su negocio más rentable. Intentó comprar alguna bolsa en la boutique de Hermes pero le dijeron que no había, y menos si no estaba en la lista de 2 años de espera. Sin embargo, detectó una maniobra de los vendedores: cuando alguien entraba a la tienda y gastaba varios miles en sus artículos, frecuentemente era llevado aparte y se le planteaba lo siguiente " Un cliente ordenó una bolsa Birkin hace dos años y ya llegó. Finalmente decidió no comprarla; ¿le interesaría verla?" Evidentemente la clienta o cliente van a decir que sí. Y la van a comprar. Simplemente es una "statement piece" sin necesidad de logos por todos lados. Es una pieza que se hereda y, en lugar de devaluarse, ¡vale más!

El ex maquillista decidió intentarlo por su parte y durante 10 años ha visitado más de 100 boutiques Hermes para conseguir los bolsos para sus clientes, a los cuales comenzó contactando a través de las ventas en e-bay. En una entrevista para The Boston Globe el 17 de abril de 2008, confiesa que en un año, gastó más de 1 millón de dólares en Hermes con la maniobra para conseguir las deseadas bolsas. Sin embargo, es discreto al hablar de números cuando el reportero le pregunta por sus ganancias; simplemente contesta con una sonrisa "Digamos que simplemente gané lo suficiente para comprar este traje Thom Brown de 5, 400 usd que traigo puesto" WOW!

De esta manera, Michael pone en evidencia que el asunto de la lista es más una maniobra de mercadotecnia que una realidad necesaria para confeccionar los bolsos. A pesar de esto, una vocera de la famosa casa francesa dijo que " No hay truco ni sistema que burlar para conseguir una Birkin" "Es simplemente un asunto de formar relación con la tienda y trabjar con un asociado (vendedor) para seguir la trayectoria de un bolso si es que hay alguno en ese momento, ya que el número es limitado. Una sola Birkin puede tomar hasta una semana en completarse".